Al leer o escuchar el contenido de esta página estas eligiendo conscientemente, recordando y avisando a cada una de tus partes, que puedes crecer y evolucionar más elegantemente a través del amor y la alegría.
La dignidad es una voz, una fuerte voz, en los encuentros y contestaciones de los retos diarios de la vida, de los meros retos de construyendo, estirando y creando un futuro que se manifestará ahora. Junto con la libertad, la integridad, el espíritu, la resonancia misma de la dignidad es el núcleo en el hacer y el trabajar de los milagros. Es en el mismo núcleo de trabajar con esa máquina creadora de milagros que muchos de ustedes todavía trabajan, con algún talismán creador de milagros, o con un cristal creador de milagros. Trabajando en la dignidad puede revolver, generar y expandir, no solamente cualquier tipo de materialización o cualquier tipo de milagro en tu realidad. Y el trabajo que se haga al respecto puede traer más dignidad al planeta, y no sólo más dignidad sino también, una mayor dignidad, no solo en tu realidad, también en el mundo que se está desdoblando acerca de ti. Y si el placer, la alegría, amor con el que te damos la bienvenida también crece y se expande.
Cuando las tragedias suceden, las personas tienden a pensar que es lo que realmente les importa, y son agradecidos por las cosas que les importan que aún tienen, que aún sostienen, y a veces en algunas personas eso sucede por primera vez, se dan cuenta de lo que realmente les importa. Cuando golpea la tragedia, la gente se pide, busca, alguna gente hasta espera que sucedan milagros. Es una avenida muy conocida y transitada, la tragedia, y la materialización esperando a ser manifestada, milagros esperando a ser manifestados, fluirán por esa avenida si esa es la única avenida disponible. No tiene que ser la única avenida, cosas como la materialización, cosas como los milagros pueden fluir por la avenida de la dignidad, pero ese es un camino menos transitado. Por ejemplo, en la realidad del consenso, la mayor parte de las personas no están conscientes de la dignidad, no la entienden, pocos están conscientes, pocos entienden, y más pocos conocen la dignidad. En el mundo del consenso, es sumamente difícil imaginar que milagros, que materializar y milagros pueden venir de la dignidad, no se les ocurre, y aunque se les ocurra se les dificulta mucho imaginar a la mayoría de la gente, si no la puedes imaginar, aunque la esperes, aunque la desees, usualmente no sucede. En la realidad del consenso, por ejemplo, la dignidad, donde sea que se encuentre, es considerada una recompensa suficiente, si alguien tiene dignidad (lo que sea que eso signifique), seguramente no se merecen más, seguramente no se merecen más recompensas, tienen un pesar, no está bien. La gente no espera la materialización, no espera los milagros que emerjan de la dignidad.
Es un hecho que cuando despiertas la dignidad en ti mismo, en el mundo, la materialización fluye, y lo que importa comienza a llegar a tu realidad, no solamente sabiendo lo que importa, pero teniendo lo que te importa a ti, y hay una diferencia, obviamente, la gente puede saber lo que importa, ¿pero lo tiene? ¿es parte de su realidad?, verán cuando despiertas la dignidad, por cualquier avenida que uses, cuando despiertas la dignidad, lo que importa se hace más consciente, y lo que importa comienza a fluir a tu realidad. Cuando despiertas la dignidad, la dignidad personal, la dignidad humana, cuando despiertas la dignidad, milagros que han sido creados y que están esperando, ansiosamente esperando comienzan a manifestarse. Milagros que ya han sido creados en el éter, que ya han sido creados en lo más real, esperando a encontrar una casa, esperando a manifestarse en tu ilusión, que están esperando ansiosamente, se manifiestan. Verán en la cara de la tragedia, la gente despierta a lo que le importa, han platicado con otras personas, o ustedes mismos han manifestado, dinero, una cosa u otra, tomado pasos para ayudar a aquellos que han sido golpeados por la tragedia, tragedias nacionales, tragedias internacionales, tragedias globales, tragedias personales, han tomado esos pasos y cuando han hecho eso, cuando han tomado acción para responder a esa tragedia en la vida de otra persona, tu dignidad, aunque no sepas que es, despierta. Tu sentido de tu carácter, tu conexión con el alma, tu conexión con el espíritu, tu sentido de la libertad, estas cosas que son partes de tu dignidad despiertan, se agitan, aunque no sean reconocidas o nombradas como eso, la persona que no se considera para nada metafísico, o para nada un mago, que ve una tragedia y hace algo para responder, para dar algo de ellos, no para recibir algo, no a cambio de algo, solamente para dar, para ayudar, para alcanzar y levantar, ayudar de alguna manera, eso detona algo en ellos que es parte de su dignidad, y cuando eso sucede, lo que a ellos les importa cobra vida, no todas las cosas que les importa, la materialización comienza a llegar a su mundo. Y los milagros, milagros que están allá afuera, entran no solo por esa avenida de la tragedia, no solo lo que importa es encontrado o recordado, no solo la gente comienza a buscar, querer, pedir o hasta esperar milagros, pero esa materialización se hace real, y esos milagros pueden manifestarse. Pero como pueden darse cuenta, la avenida de la tragedia es muy transitada, y no estamos sugiriendo de ninguna manera que esa es la avenida que debes de seguir, ciertamente si en tu realidad has permitido que entren las tragedias, que ves, que experimentas, y la oportunidad por supuesto responde, no estamos sugiriendo lo contrario, pero lo que estamos sugiriendo es que hay otros caminos en los que tú puedes activamente, conscientemente, despertar la dignidad sin tragedia, usando dignidad, para el flujo de la materialización y el flujo de los milagros.
Vamos a hacer la materialización de una forma distinta, en lugar de tener que basarnos y apoyarnos en la tragedia. Estando en un caos oscuro, lo que sugerimos, aunque el caos sea oscuro puede ser levantado y convertirse en caos luminoso, también sumergirse en las crisis, aún en las profundidades de una crisis, el cambio de energía que podría suceder, llamará el balance. El oportunismo, puede cambiar, puede elevarse, puede cambiar, a una muy real oportunidad. Y perdiéndose el enfoque mundano, puede llegar la claridad a través de la renovación. Aún con todo esto puede llegar el caos luminoso, puede llegar el balance, puede llegar la oportunidad y puede llegar la renovación. Y hay gente que ya está experimentando ese caos luminoso, y sintiendo el balance, y se le están presentando las verdaderas oportunidades, y está teniendo esa renovación, y si no lo has estado experimentando todavía, lo estas sintiendo llegar, lo estás sintiendo en el aire, no sabes cuándo, no sabes cuando y donde, pero lo sabes. Aunque no puedas ponerle palabras, estas comenzando a sentirlo, está llegando, es más lento de lo que anticipamos, de lo que parece, debería haber llegado antes, pero el debería, podría, es solamente otra forma de culpa que tiene poco o ningún valor, lo importante es de que está llegando y mientras despiertas la dignidad, muy conscientemente, al trabajar con la magia, ese comienzo puede ser facilitado, puede haber elegancia, mientras el caos se hace luz, mientras el balance emerge de tu crisis personal y experiencias por observación, y mientras el oportunismo da lugar a las oportunidades, y mientras el enfoque encuentra claridad en la renovación. Es tiempo de poner tu atención en tu bienestar, y en tu libertad, despertando la dignidad podría ser una manera de responder, a tu sentido, a tu estado de bienestar, y tu relación con la libertad.
Ahora hablemos sobre que es la dignidad y por qué te resistes a ella. Hemos mencionado a 2 clases de dignidad, la dignidad humana que es como un tipo de paraguas, que es aplicable a todos los seres humanos, y luego está tu sentido de dignidad personal, que obviamente todos la tienen, es tu derecho, pero no todos lo saben, cuando hablamos de dignidad humana, a lo que nos referimos es a aquello que es inherentemente noble, eso que es inherentemente digno de ser humano, de ese fenómeno que tu como ser espiritual has escogido manifestar y contener al menos suficiente de ti, suficiente de lo que realmente eres en esta forma física, eso que es innatamente noble de ser humano, eso que inherentemente innatamente digno de la humanidad, particularmente, específicamente a lo que nos referimos, cuando lo mencionamos son tus regalos de ser un humano, de conscientemente concebir y de ahí conscientemente percibir, ciertamente las plantas y los animales conciben y perciben pero es una respuesta instintiva, no una respuesta consciente, no es una decisión concebir algo nuevo, ya sea un niño en el caso de los humanos, una idea, un proyecto, un concepto, el conscientemente concebir y después ir a esa concepción y conscientemente percibir es un regalo a la humanidad, no al animal humano y no al reino animal, o al reino vegetal o al reino mineral, tener esa capacidad como regalo humano, y es heredado, es noble y hace digno ser humano. Concebir y percibir eso es uno, un regalo. Otro es conscientemente sentir las emociones, todas las emociones, aunque algunos humanos tratan de negar las emociones, ocultar o pretender, todo eso. El tercer regalo es ser capaz de conscientemente pensar, conocer tu pensamiento, verte a ti mismo pensar, y el escoger como pensar, de esta manera, de esta otra, de trabajar conscientemente con el pensar, lo haces tan automáticamente el pensar y el sentir, o su negación tan consistentemente, más sin embargo es un regalo, un noble y digno componente de ser un humano. Otro regalo, la capacidad de saber tus necesidades, tus deseos, tus preferencias, y poder ordenarlos, priorizarlos, ponerlos enfrente, en medio, moverlos al final, saber cuáles son tus necesidades, tus deseos, tus preferencias, un regalo humano. Y más allá de eso el quinto regalo, la imaginación, el poder ser capaz conscientemente imaginar, sueños de animales, y sueños de plantas y minerales también, lo haces conscientemente, así como también sin una consciencia despierta, pero lo puedes imaginar y crear conscientemente imágenes que tu cerebro no puede distinguir de la realidad, no solamente una activa, sino una imaginación viva, una imaginación de cuerpo completo y pasional, el sanar conscientemente y el amar conscientemente.
Y estos son los 7 regalos humanos. Tu capacidad de ser consciente, de usar, de contar, esto es lo que es noble, es lo que es digno, inherentemente digno y noble, en todos los seres humanos. Así como los regalos humanos. Tu feroz majestuosidad, y la tenaz magnificencia para amar, y más allá de amar, esa feroz majestuosidad, esa tenacidad magnífica de importarte, también innata en los seres humanos en el planeta tierra, en ti y tu realidad. Y esto es lo que compone la dignidad humana. Tu puedes despertar estos regalos, tu puedes despertar esta majestuosidad y magnificencia, tu dignidad humana, más particularmente, tu dignidad personal.
El primer componente de la dignidad personal es el Ser Valorado, el ser consciente, auto consciente, auto valorado, auto estima, amor propio, y más allá del amor propio, auto confianza, auto respeto y auto realización. Del ser consciente al ser realizado, el proceso el ser valorado. Pequeño ser, más grande ser, valorándote a ti mismo como lo definas, y tu yo superior, que está normalmente más allá de tu definición, estar consciente, auto consciente, auto valor, auto estima que es el amor que te ganas, amor propio que es el amor que recibes que es dado, auto confianza, auto respeto que es ser capaz de voltearte a ver, de verte a ti mismo y estar orgulloso de lo que ves, y la realización de lo que eres que es la auto realización. Estos son los componentes, no tienes que tenerlos a todos en su lugar, todos están presentes en algún nivel u otro. Por lo tanto, la primera voz, el primer componente de tu dignidad personal, el Ser Valorado.
El segundo componente es la Intensidad, esto es un poco difícil de entender para muchos porque muchos no entienden la intensidad, creen que la intensidad ruidosa, que es una impactante ola aplastante, piensan de la intensidad como algo melodramático o dramático, pero en realidad la intensidad, es estar en el momento y en tu elemento. Intensidad, prestar atención al detalle, ser paciente, tener una intención enfocada, otra forma de decir elección consciente, intensidad, sabiduría y un componente que usualmente es olvidado, ser capaz de dejar ir el momento cuando ha pasado. Si mucha gente puede estar en el momento, absolutamente, y pueden estar en su elemento, que significa, son capaces de estar conscientes de su energía de pensar, de su energía de percibir que es el aire, de crear que es el fuego, o la energía sanadora que es el agua, o la energía de saber que es la tierra. Es una metáfora del elemento, tierra, fuego, agua, aire, ellos pueden estar en su elemento, ellos pueden ser muy luminosos, o muy llameantes, o muy fluidos, o muy sólidos, como lo determines como lo sientas, metafóricamente sentir tu elemento, pueden estar en el momento y pueden estar en el elemento, y pueden poner atención al detalle, ellos pueden amar, ellos también pueden ser pacientes, escuchar más detenidamente, ver más profundamente, que es lo que la verdadera paciencia es. Y si ellos pueden escoger, y ser conscientes de escoger, enfocar su intensión, y también pueden ser sabios, ver el cuadro grande sin perder de vista el cuadro pequeño. Pero el último componente de la intensidad tan crítico, es ser capaz de dejar ir el momento cuando pasa. El dejar ir esa alegría cuando es tiempo de avanzar, el dejar ir ese dolor, o ese enojo, o esa herida cuando es tiempo de dejarlo ir, estar en el momento y dejar ir el momento, muy crítico a lo que es la verdadera intensidad. Y esa es la segunda voz, el segundo componente de la dignidad personal, la Intensidad.
El tercer componente, Fuerza de Carácter. Esa fuerza de carácter, todos tienen carácter, bueno quizá haya algunas personas que no tienen ningún principio, sin embargo, si te has hecho adulto y particularmente adulto y mago, tú tienes principios. Carácter es tú habilidad, voluntad y elección de adherirte a tus principios, de adherirte a esos límites positivos, que te guían a tu ideal. Fuerza de carácter, todos tienen carácter, todos tienen principios a los cuales pueden adherirse, si lo haces bien, si lo haces conscientemente entonces tienen un fuerte carácter, si te tambaleas, si fallas y te caes entonces tienes un carácter débil. Es la fuerza de ese carácter, lo que determina, construye, crea, eso que es tu dignidad humana. Sigues tus principios, aun cuando “no tienes que”, aun cuando nadie está viendo, aun cuando puedes salirte con la tuya, aun cuando no es conveniente, o cuando no es expeditivo. Esto es la fuerza de carácter, el tercer componente de la dignidad personal.
El cuarto componente es confuso, tiendes a sobrellevarlo, lo llamamos el marco por el cual percibes tu realidad, por lo que lo que es real fluye, por lo que tus patrones de resistencia, en este punto en particular, están hechos, tus memorias, tus mitos, tus visiones y sueños. Tus memorias, de la miríada de memorias de tu niñez, de tu adolescencia, de tus años de adulto, de tu miríada de memorias, incontables, cuales son las que conservas, las negativas, las sínicas, conservas las débiles, las humillantes, conservas las positivas, las bellas, ¿has dejado ir todas las viejas memorias destructivas? Pero, ¿has conservado las bellas y positivas? ¿Dejas ir las que hablan de lo que no eres y conservas las que dicen lo que eres? ¿O no le has puesto mucha atención en más de 1 década? Las memorias están ahí, aunque estés o no consciente de ello, están ahí, y están filtrando todo lo que llega a tu realidad, todo lo que programas, es filtrado a través de ahí lo que sale y todo lo que genera la programación es filtrado entrando, toda la magia que trabajas, que sueltas pasa a través de tus memorias y todo el producto que resulta de esa magia fluye a través de las memorias cuando entra. ¿Has volteado a verlo? ¿te has preguntado que sucede en el marco de tus memorias? Mitos, no los mitos que inventas, si no los rituales líricos por los cuales vives tu vida, las reglas que usas, las creencias que cargas de cómo funciona la realidad. Estos son los rituales líricos, que son tus mitos personales. Las memorias y los mitos, crean resistencias, crean una estructura por la cual lo no físico se precipita a lo físico. Y de la misma manera, lo que sueltas que sale “hacia afuera” hacia lo más real, las memorias y mitos crean como una malla sobre lo que todo es filtrado, pero no son solo memorias y mitos, no solo las cosas que guardas del pasado, también son tus sueños y visiones, y el detalle es que no son los sueños que le cuentas a los demás que estás teniendo son los que estás viviendo, no son los sueños que sueñas, son los sueños que vives. Viviendo los sueños, un sueño que obtienes, que buscas, y que todos están haciendo, no los sueños que sueñas, los sueños que estás viviendo, eso también forma el filtro, y las visiones que conservas, las creencia y elecciones, actitudes, pensamientos, sentimientos, son materias primas que muy seguido son moduladores que forman la estructura, las visiones como las proyectas, tu realidad, a ti mismo, otros en tu realidad, el mundo a tu alrededor, ves todas estas cosas trabajan juntas, para crear la malla, el marco en el cual tú vives tu vida en el cual tu creas tu realidad, en el cual tu trabajas tu magia, es este marco el que es también tan vital a tu sentido de dignidad humana, de dejar entrar, por ejemplo, la dignidad humana a ser parte de tu dignidad, aceptar lo que es tuyo inherentemente de lo cual tienes derecho por el verdadero hecho de que eres un ser humano tú tienes derecho a estos regalos, a esta majestuosidad a esta magnificencia de tu amor e importancia, está ahí pero ¿lo dejas entrar? Si lo haces, si lo haces, pero muchos en tu realidad no. Esto es parte de esta estructura, este marco, es parte de tu dignidad humana, más allá de ese folclor, de ese cuarto componente, donde está balanceado tu Ser Valorado, tu Intensidad, tu Fuerza de Carácter, más allá de ese marco, hay otros 3 componentes más.
El cuarto componente quizá es confuso, tiendes a sobrellevarlo, lo llamamos la Estructura por la cual percibes tu realidad, por lo que lo que es real fluye, por lo que tus patrones de resistencia, en este punto en particular, están hechos, tus memorias, tus mitos, tus visiones y sueños. Tus memorias, de la miríada de memorias de tu niñez, de tu adolescencia, de tus años de adulto, de tu miríada de memorias, incontables, ¿Cuáles son las que conservas, las negativas, las sínicas?, ¿Conservas las débiles, las humillantes, conservas las positivas, las bellas?, ¿has dejado ir todas las viejas memorias destructivas? Pero, ¿has conservado las bellas y positivas? ¿Dejas ir las que hablan de lo que no eres y conservas las que dicen lo que eres? ¿O no le has puesto mucha atención en más de 1 década? Las memorias están ahí, aunque estés o no consciente de ello, están ahí, y están filtrando todo lo que llega a tu realidad, todo lo que programas, es filtrado a través de ahí lo que sale y todo lo que genera la programación es filtrado entrando, toda la magia que trabajas, que sueltas pasa a través de tus memorias y todo el producto que resulta de esa magia fluye a través de las memorias cuando entra. ¿Has volteado a verlo? ¿Te has preguntado qué sucede en la estructura de tus memorias? Mitos, no los mitos que inventas, si no los rituales líricos por los cuales vives tu vida, las reglas que usas, las creencias que cargas de cómo funciona la realidad. Estos son los rituales líricos, que son tus mitos personales. Las memorias y los mitos, crean resistencias, crean una estructura por la cual lo no físico se precipita a lo físico. Y de la misma manera, lo que sueltas que sale “hacia afuera” hacia lo más real, las memorias y mitos crean como una malla sobre lo que todo es filtrado, pero no son solo memorias y mitos, no solo las cosas que guardas del pasado, también son tus sueños y visiones, y el detalle es que no son los sueños que le cuentas a los demás que estás teniendo son los que estás viviendo, no son los sueños que sueñas, son los sueños que vives. Viviendo los sueños, un sueño que obtienes, que buscas, y que todos están haciendo, no los sueños que sueñas, los sueños que estás viviendo, eso también forma el filtro, y las visiones que conservas, las creencia y elecciones, actitudes, pensamientos, sentimientos, son materias primas que muy seguido son moduladores que forman la estructura, las visiones como las proyectas, tu realidad, a ti mismo, otros en tu realidad, el mundo a tu alrededor, ves todas estas cosas trabajan juntas, para crear la malla, la estructura en la cual tú vives tu vida en el cual tu creas tu realidad, en el cual tu trabajas tu magia, es esta estructura que es también tan vital a tu sentido de dignidad humana, de dejar entrar, por ejemplo, la dignidad humana a ser parte de tu dignidad, aceptar lo que es tuyo inherentemente de lo cual tienes derecho por el verdadero hecho de que eres un ser humano tú tienes derecho a estos regalos, a esta majestuosidad a esta magnificencia de tu amor e importancia, está ahí pero ¿lo dejas entrar? Si lo haces, si lo haces, pero muchos en tu realidad no. Esto es parte de esta estructura, esta estructura, es parte de tu dignidad humana, más allá de ese folclor, de ese cuarto componente, donde está balanceado tu Ser Valorado, tu Intensidad, tu Fuerza de Carácter, más allá de esa Estructura, hay otros 3 componentes más.
El quinto componente de la dignidad personal es tu relación con el Alma. Esto podría ser algo nebuloso, pero vamos a sugerir lo siguiente. ¿Cómo te sientes acerca de experimentar la bella tristeza de la pena (un profundo dolor)? ¿Cómo te sientes acerca de ser tierno, acerca de sentirte tierno? ¿Retrocedes de todos los tipos de tristezas? Por miedo a que sea una tristeza dolorosa, o una tristeza fea, ¿Te reformulas de sentirte con pena (un dolor profundo)? ¿Escudándote, entumeciéndote, distrayéndote? El ser tierno ¿está bien eso? ¿O es algo que solamente otra gente puede ser? ¿Es eso algo muy vulnerable? ¿Muy vergonzoso? ¿O potencialmente algo sujeto a la crítica de otra gente? ¿Te importa eso? ¿Qué otros vean tu ternura, o que de alguna manera te vean menos que admirable? ¿Cómo te relacionas con la pasión, el ser pasional? ¿Y cómo te relacionas a ser valiente? Verás estos son los componentes, has escuchado hablar de estas palabras, pero cuando sientes estas cosas tu alma está presente, aún para aquellos que podrían no entender lo que el alma es, y tu si entiendes mucho más de lo que algunas veces admites, pero cuando sientes esa bella tristeza que es encontrada en la pena, o la ternura en donde sea que la encuentres, cuando sientes que eres pasión, que eres pasional, y cuando eres valiente en el verdadero significado, no en el significado distorsionado de manera chovinista, sino en el verdadero significado de ser valiente, y cuando eres seguro y tienes confianza en ti mismo, así como eres confiable a los otros, no todos, los otros confiables, tu alma está presente. Cuando eres gentil, cuando sientes alegría. ¿Cómo te relacionas con esto? ¿Cómo te relacionas con tu alma?
El siguiente componente, el sexto componente, es tu relación con tu Espíritu. ¿Cómo te relacionas con tu Espíritu? ¡Esa luz, esa energía masculina que es tu Espíritu! Y nuevamente nos referimos al sentir, a los sentidos, mejor dicho, a las sensaciones que hacen que tu espíritu se muestre. Sentirte poderoso, sentirte libre, sentirte bien, y verdadero. No haciendo cosas buenas, no siendo bueno, pero sintiendo esa bondad y verdad que tú eres. Valorándote a ti mismo, saber que eres valorado, y que eres amado. El quinto componente, que tú eres amado. Sentirte alineado, en la zona, y saber que eres suficiente, aunque no puedas hacer nada más, tú sabes que eres suficiente. Tu espíritu está presente, pero ve, para entender tu estructura, para entender este componente de la dignidad, como te relacionas a estas cosas, es algo que tu libremente admites y estás dispuesto a hacer lo que ansiosamente alcanzas, o ¿te sientes culpable de ser libre?, la bondad y verdad que sientes, ¿te diluyes a ti mismo? ¿te retiras, retrocedes de esos sentimientos? ¿O de que otros lo vean en ti, pero tienes miedo de vértelos en ti mismo? El ser valorado, el saber que ya eres valorado, que ya eres amado, que estas alineado, estar en la zona, ¿Cómo se siente eso? ¿Cómo te relacionas a eso? ¿Cómo reaccionas o respondes a eso? Saber que eres suficiente, oh ojalá supiera… pero ¿Cómo relacionarte al hecho, al sentido, al sentir, a la sensación de tú eres suficiente? Ves, esto también habla, esto es un poderoso indicador de cómo te relacionas con tu alma. Un vital componente de la dignidad personal.
Y el último, el séptimo, la Libertad. Tú libertad, tu sentir interno y externo, la más temprana libertad interna, ya que, aunque vivas en una sociedad que no es libre, tú puedes sentirla, tú puedes crear esa libertad interna.
Estos son los componentes, que componen, que crean la sinfonía, la expresión de coro, las voces de la dignidad, tu dignidad. ¿Por qué te resistes? Aunque sepas mucho de esto, aunque muchos de ustedes han hablado de estas cosas antes, ¿Por qué te resistes? Estar atento, estar consciente, tú tienes dignidad, tú tienes dignidad. Pero tú la dejas estar despierta, tú la dejas respirar, tú la dejas expandirse y contraerse, inhalar y exhalar, o es algo que se sienta callada, muy seguido durmiente, que la llamas solamente cuando checas tus notas, y ves oh, la dignidad es parte de este proceso, te dejas a ti mismo deslizarte por encima, o de vez en cuando como ahora, te permites detenerte y pensar al respecto y sentirla. ¿Por qué te resistes? Parte de la razón tiene que ver con los mismos componentes, para la mayoría te resistes en aceptar tu dignidad humana, porque no sabes, o porque no te permites darte cuenta de lo que quieres o tu necesitas, tus necesidades, pero lo que quieres o prefieres, y eso está bien, pero está ahí y puede atravesarse en tu camino, muy consistente, ¿Qué es lo que tú necesitas, que es lo que tú quieres, que es lo que tú prefieres? Puede ser algo que está obstaculizando esta dignidad humana, porque no te estás dando cuenta de tú pensamiento, de lo que está pasando con tú pensamiento, o porque estas estilizando o limitando, apagando tú imaginación. Porque tú no sientes tu majestuosidad y la fiereza de tu amor, del amor humano, y de tu cariño. Cuando estas cosas están embotadas, cuando están entumecidas, o denegadas, ellas pueden limitar tu capacidad de dignidad humana. No, eso no tiene que significar que debes de saber lo que quieres en todo momento, no, hay muchos de ustedes que, en este tiempo de caos, que están saliendo de una crisis buscando balance, muchos de ustedes, están materializando, están descubriendo, que no saben hacia donde van, que no saben hacia donde se dirigen, pero puedes saber que eres uno en confusión, que están en medio, en transición, que eres alguien en busca dé. Eso tú puedes saber, aunque no sepas el resultado final. Tú todavía puedes saber que lo que deseas ahora, es buscar, todavía no quiero saber, todavía no quiero tener las respuestas, preferiría buscar por un tiempo, preferiría sentir estos sentimientos, preferiría salir de esto, preferiría lidiar con esto, preferiría experimentar y explorar, no quiero tener las respuestas todavía, no quiero saber hacia dónde voy, yo quiero saber que soy alguien que esta yendo, como quieras que desees decirlo, no es como si tuvieras que tener todas las respuestas, tener ese sentir, pero este particular regalo, de estar consciente de tus necesidades y deseos, tus preferencias, está fuera de equilibrio, puede diluir, puede resistir esa dignidad humana, pero más al punto, más particularmente, porque te resistes a tu dignidad personal, del mismo modo tiene que ver con ese cuarto componente, la estructura, esta fallida, estoy cargando muchas memorias negativas, destructivas, paralizantes. Muchos de los mitos, por los que yo vivo mi vida, las reglas, los principios, creencias, están constreñidos. Muchos de mis recuerdos y mitos, y los sueños, no los sueños que sueño, sino lo sueños que estoy viviendo, las visiones, que estoy actualmente usando están fallidos. Necesito limpiar la pantalla, necesito limpiar el filtro, una estructura fallida me ocasiona que tenga miedo, que me resista, que niegue mi propia dignidad personal. De la misma manera un carácter débil, y decimos esto no para insultarte, simplemente si tu carácter es débil, entonces fortalécelo. Así como físicamente si estas en la necesidad de requerir músculos más fuertes, y tus músculos están débiles, fortalécelos. Entonces con carácter, no que sea malo, no que sea equivocado, simplemente es débil, entonces lo necesito fortalecer aquí, acá, no necesariamente en todos los aspectos, no para ti, no más. O quizá sea ese quinto componente, mi relación con mi alma, que me he mantenido extraño, fuera de mi Alma, esto puede causar miedo, tengo miedo de mi dignidad, por mi estructura, el mismo folclor por el cual esta balanceada, por ese tercer componente, fuerza de carácter por ese quinto componente mi relación con mi Alma, ciertamente los otros, pero esos en particular crean resistencias. Otra arena de resistencias, tiene que ver con el miedo de que, abriéndote a la dignidad, te acercas mucho a la tragedia. Y que queremos decir con eso, vamos a decirlo de esta manera, que los fuegos de la tragedia y los fuegos de la dignidad están muy cercanos el uno al otro, no son opuestos, y el miedo es que siguiendo y encontrando mi dignidad solamente acabaré percatándome de la tragedia, si verdaderamente estoy valorándome a mí mismo, y soy intenso en el momento, dejando ir el momento y todo lo que hay en medio, la fuerza de carácter, adherirme a mis principios, ya sea si tengo que o no, con una estructura que está limpia y clara, y brillante, de cualquier manera que lo determines, con el poder de la relación con mi alma, cuando siento esta tristeza, cuando soy cariñoso, cuando soy pasional, cuando soy confiado y confiable, y cuando soy valiente, cuando estoy lleno de alegría, y cuando estoy con mi Espíritu sintiéndome poderoso, y bondadoso, y verdadero, valorado, y enamorado, y alineado, y sabiendo que soy suficiente solamente con la forma en como soy, si hago eso, y soy libre, voy a ser más sensible a las tragedias del mundo, voy a escuchar a las noticias, o escuchar a la gente, oh no… Estoy mejor robándome a mí mismo, estoy mejor retirándome, estoy mejor apagándome, estoy mejor cuando no expresándome, no sintiendo mis emociones, estoy mejor… separándome, porque el estar consciente de la tragedia de la cual hay mucho ahí afuera ahora, o quizá siempre ha estado ahí, pero mientras estoy despertando, mientras estoy tomando vida, estoy sintiendo esta… dignidad y todo lo que se involucra con la dignidad independientemente de cómo se llame, voy a estar consciente de la tragedia, si yo abro mis ojos para ver con el amplio espectro de lo que necesito ver para tener dignidad también voy a ver tragedia y yo no quiero ver tragedia, yo no quiero sentir la tragedia, yo no quiero estar consciente de ella, dignidad y tragedia muy cerca la una de la otra, y porque no quiero una tengo miedo de la otra, ustedes saben, cuando yo no sabía nada, toda mi vida era, lo que Dios me daba, lo que pasaba por casualidad, la vida era mucho más sencilla entonces, si era mucho más sencilla, y oh, mucho más difícil, y mientras creciste, mientras te expandes, tu lente, tu capacidad de ver el sueño, tú también estás más consciente del dolor de la pesadilla que otros han escogido, mientras te mueves hacia una más grande dignidad tú vas a estar más sensible a la tragedia, no la que tu experimentas, de la que tú eres testigo en el mundo, eso le da miedo a algunos de ustedes, eso asusta a alguna gente, muchos en el mundo. Otro, es el miedo de admitir, yo tengo dignidad, yo soy una persona dignificada, hombre, mujer, miedo de admisión, es muy vulnerable, otros podrían estar celosos, yo podría ser arrogante, u otros podrían pensarlo de mí, por realmente adueñarme de mi dignidad, ok yo acepto el paraguas de la dignidad humana, pero para adueñarme de mi dignidad personal, requiere mucho de mí, demanda mucho de mí, yo temo admitirlo, y por consecuente lo resisto. Y cuarto, y finalmente sugerimos la resistencia, yo tengo miedo de la libertad, esta cantidad yo tomo, pero para ser más libre, y más libre, y más libre… en un determinado punto me asusta. Hay muchos de ustedes que están leyendo esto que no habían considerado estas cosas en mucho tiempo. Y entonces nosotros hablamos de ellas, esto es un trabajo de magia, la magia comenzó desde que comenzaron a leer la página, mientras tú recuerdas, o te haces consciente nuevamente o por primera vez, la magia ya está en camino.
La dignidad está despertando en ti, está viva en ti, y está viva en tu mundo. Y cuando sales a tu mundo, llevas contigo la dignidad, aunque no puedas describirla ni nombrarla, ni decir que es lo diferente, está despertando en ti, deja que eso sea real, deja que eso sea real, escoge que sea real, deja que la dignidad se manifieste, reflexiona sobre eso, se mostrará, los regalos estarán más afilados quizás, tú amor lo entenderás, que tan majestuoso es, que magnífico, y sentirás ese valor o esa nobleza de la humanidad, y de tu dignidad personal, quizá el componente más fuerte, o los otros componentes haciéndose más fuetes, todavía estarán los que son débiles y confusos, y de los que no estás seguros, trabaja con los otros, con los fuertes, sabrás que ellos están viniendo, un más grande sentido de la dignidad, tus resistencias podrían aparecer pero ahora puedes soltarlas, déjalas ir, y conforme comiences a despertar la dignidad, en lugar de por la tragedia, por la magia, saber lo que importa puede hacerse más claro, y lo que importa puede comenzar a manifestarse más elegantemente, y los milagros que ya han sido creados que están esperando, como fósforos y chispas en el mar, pueden venir a hacerse y existir, pequeños milagros, maravillosos pequeños milagros, que pueden cambiarte y cambiar el rumbo del mundo. Y mientras sales al mundo tú llevas esa dignidad al mundo, y comienzas a despertar la dignidad en otros y cambiar el curso del mundo. Y el mundo puede ser el beneficiario, tú el benefactor, de una dignidad despertando.